Conclusiones generales


En un entorno de fuerte crisis económica, el seguro de D&O se vuelve a mostrar como una importante herramienta de defensa para poder operar sin riesgos a los posibles errores de gestión. 

Sin embargo todavía una de cada dos empresas no contratan el seguro de D&O por desconocimiento del mismo, mientras que sólo el 13,1% lo hace por el precio. 

En el escenario legal, con las reformas de la Ley de Sociedades de Capital, el Código Penal y el Proyecto de Código Mercantil, se endurece significativamente el régimen de responsabilidad de los administradores sociales. La legitimación directa a la minoría, la obligación de la sociedad de reembolsar al accionista los gastos en los que haya incurrido al reclamar en beneficio de la sociedad o la extensión de responsabilidad a ciertos cargos como el Director General cuando no exista Consejero Delegado, son algunas de las propuestas del Proyecto de Código Mercantil en este sentido, aunque no las únicas. 

A esto se une la exigencia social de gestionar la empresa con transparencia y en interés de la sociedad, evitándole imputaciones penales. En este contexto aumentará el activismo accionarial y la actividad de los proxy advisor, lo que repercutirá en un aumento de las reclamaciones. En el otro lado, parece que se suavizará el régimen de prescripción de la responsabilidad en ciertos supuestos (dies ad quo) y se establecerán business judgement rules para proteger la discrecionalidad empresarial en el ámbito de las decisiones estratégicas y de negocios, considerándose que el empresario ha actuado diligentemente cuando haya actuado de buena fe, sin interés personal en el asunto, con información suficiente y en el marco de un procedimiento de decisión adecuado.

SER ADMINISTRADOR O PERTENECER A UN CONSEJO DE ADMINISTRADOR YA ES CONSIDERADO UNA PROFESION DE RIESGO!!!